Los Carmelo, 10 x 10 con acabado antique, pálidos, sencillos y muy decorativos. Los recomiendo para intercalar con lisos que lleven el mismo acabado, tal vez con sus vértices patinados simulando las malas limpiezas ja ja, además del craquelado mágico de los años. Los veo en un lugar en donde todo sea blanco impecable, con toques de objetos antiguos y repasadores con puntillas.